BS"D
Por Reuel Rolando Schnyder
"Estoy luchando para abandonar mis creencias, pero...¿cómo puedo negar las profundas experiencias religiosas que he tenido?"
Esta es una clásica declaración de muchas personas que me escriben.
Lo primero que tenemos que tener en cuenta es que se trata justamente de eso, DE EXPERIENCIAS. Casi toda persona que practica cualquier religión tiene mucho que contar. Cada cual ha tendido seguramente varias experiencias místicas o al menos que parezcan haberlo sido.
Entonces con ese argumento cada cual perfectamente podría sustentar sus creencias y esto no se podría discutir.
Pero el profeta Irmeiáhu / Jeremías nos advirtió hace más de 2500 años: "ENGAÑOSO ES EL CORAZÓN, MÁS QUE TODAS LAS COSAS" (17: 9)
El corazón tiene que ver con la mente, con los pensamientos, las emociones y la voluntad... Los mismos profesionales hoy día no pueden terminar de dilucidarla... sigue siendo algo extraño.
Por un lado tenemos lo que es fenómeno psicológico y por el otro lo propiamente espiritual. No siempre se tratan de experiencias espirituales místicas, pero también es posible que algunas de ellas lo sean.
El Talmud Bavlí nos dice en Masejet Macot 10b: “Por el camino que la persona quiere ir, por allí es conducido (desde Arriba)”
Las personas que insisten con su fanatismo en comunicarse con sus ídolos y recibir una respuesta de ellos reciben lo que esperan. Están empecinados en su camino y por lo tanto se les provee ayuda desde el cielo para que reciban lo que buscan... pero eso no quiere decir que sea bueno para su alma. Es puro engaño e ilusión. Cada uno termina viendo y escuchando lo que quiere...
La mejor manera de despejar nuestras dudas y abandonar completamente estas cuestiones de experiencias religiosas pasadas, es aplicándose al estudio de la Verdad de la Torá con un Rabino o Maestro auténtico. Solo la Luz de la Verdad tiene la virtud de disipar TODAS las tinieblas de la idolatría.
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