Serie: Cuentos de Nunca Acabar / El amigo cristiano de buen corazón II

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El amigo cristiano de buen corazón II

Por Por Nétzaj Andújar 

Inocencio, nuestro amigo cristiano “buena gentón”, de buen corazón, luego de intentar infructuosamente persuadir a David, su amigo judío en “El amigo cristiano de buen corazón I”, ahora va al encuentro de Rut, una ex hermana en la fe, que ahora es judía.

Aunque la derrota ante David fue apabullante y contundente, Inocencio sigue creyendo que sus ayunos y largas horas orándole a su “deidad” cristiana le ha dado algún poder de convencimiento y de persuasión; a lo que llama “unción”. Por lo que está vez se siente más que seguro de que persuadirá a Rut a regresar a su pasado cristiano.

Rut nació en un hogar católico romano. A sus 16 años aceptó al cristo evangélico en una campaña evangelística. Así que pasó el resto de su adolescencia y temprana juventud adulta en una iglesia evangélica fundamentalista. Fue maestra de escuela dominical, fue predicadora evangelista y hasta misionera. Muchas personas fueron persuadidas por su prédica cristiana. Pero en algún momento de su vida, Rut decidió abandonar la cristolatría, abrazando la Torá de Moshé (Moisés).

Nuestro amigo cristiano esta escandalizado por ello. No puede juzgarla por haber sido una falsa cristiana, debido a que sus logros y comportamientos cuando estuvo en la iglesia están dentro del “testimonio” y los “frutos” esperados de un verdadero cristiano evangélico. Por lo tanto, en vez de abordarla con textos bíblicos y cuestionamientos teológicos, Inocencio tratará de persuadirla llevándola a su pasado gentil y cristiano, cuestionándole su decisión de abandonar el cristianismo, luego de haber experimentado un cambio de vida, milagros, sensación de paz, “ríos de agua viva” y muchísimas otras cosas de corte “emocionalista”.

Nuestro amigo cristiano y Rut estudian en la misma universidad. Dos días después del encuentro con David, Inocencio se topa con Rut. Era casi mediodía. 

- Cristiano: ¡Dios te bendiga, Rut! El señor te ha puesto en mi camino hoy. 

-  Hola, Inocencio. No creo que tu dios nos ponga en el camino. Simplemente nos vemos casi a diario porque estudiamos en la misma institución académica. ¿Por qué dices eso?

- Cristiano: Porque he estado orando y ayunando para este momento. ¿Podemos sentarnos a dialogar por 30 minutos? Me gustaría saber exactamente por qué abandonaste a Cristo y te pusiste tú solita esa “venda judía”. 

- Judía: Sí, claro. Sólo 30 minutos. A ver, ¿a cuál venda te refieres?

- Cristiano: Pues la venda que te ha cegado y te ha hecho negar a Jesús.

- Judía: Jajaja…

- Cristiano: No te rías. Te hablo en serio. Me preocupa tu alma. Recuerda que nadie va al padre, sino es por Cristo.

- Judía: Me rio porque me parecen graciosas y a la vez tontas esas creencias que una vez fueron parte de lo que yo tenía como “la verdad”. NO necesito ídolos mediadores para llegar al Eterno. La Torá me da acceso directo.

- Cristiano: No me parece que sea gracioso la perdición de tu alma.

- Judía: A ver, Inocencio, ¿qué quieres saber? Pregunta.

- Cristiano: Verás… No quiero hablar mucho de doctrina, pasajes bíblicos o teología. Estuve conversando con David acerca de esas cosas y veo que Satanás usa esas cosas para engañar y cegar.

- Judía: ¡Qué barbaridad, Inocencio! ¿Cómo es posible que digas que un personaje o diablo se mezcle con la Palabra del Eterno Dios de Yisrael. Además Satanás es un personaje pagano. 

- Cristiano: Satanás es un personaje real y es bíblico. 

- Judía: Inocencio, Satanás es un invento cristiano basado en creencias grecorromanas. El Satán de las escrituras judías no es ni remotamente el Satanás del cristianismo y el islamismo. Dios no puede tener enemigos ni contrapartes ni segundos (buenos o malos). De otro modo no sería soberano. Dios lo llena todo. ¡Es el único, el soberano!

Es imposible que un ángel pueda rebelarse, ya que los ángeles, arcángeles, querubines y otros seres celestiales no tienen  voluntad, no tienen libre albedrío. Su naturaleza no contempla poder decidir o cambiar. El Satán en el Judaísmo es un siervo de Dios y fue creado para poder brindarle al ser humano la libertad de escoger entre el bien y el mal.

El Satán no puede rebelarse contra Dios. El Satán sigue las pautas y ordenanzas de Dios. La naturaleza del Satán es comparable con la de los leones o tigres o cocodrilos, como cualquier otra criatura. Podrán ser peligrosos para el ser humano, pero no son enemigos de Dios. Ése es el Satán que el Tanaj menciona. Especialmente en el libro de Job capítulo 1.

Las religiones duales, que tienen un dios del bien y un archienemigo del mal son paganas. El cristianismo adoptó del paganismo esa creencia errada.

- Cristiano: Mira, como te dije, no quiero tocar temas teológicos. Quiero aprovechar este momento para hacerte ver cuán equivocada estás. Sé que el espíritu santo te va a redargüir y me lo vas a agradecer. 

- Judía: No puedo creer que quieras desechar las escrituras en temas tan importantes como éstos. Es increíble que no te percates de que tu dios es tan impotente que no puede detener a un inexistente personaje como el Satanás. Triste que haya tanta gente que por siglos ha estado creyendo en disparates y tonterías. Pero, bueno, por favor dime, ¿qué deseas preguntarme?

- Cristiano: ¿Cómo es posible que luego de haber “nacido de nuevo” le hayas dado la espalda a Jesús? ¿Dónde están esos milagros que presenciaste tantas veces? ¿Esos “ríos de agua viva”? Esa paz que sobrepasa todo entendimiento? ¿Qué pasó con toda esa espiritualidad?

- Por eso me sorprende que quieras adherirte a los sentimientos y no a las escrituras. La única manera de conocer la voluntad del Eterno es a través las escrituras que él reveló e inspiró a las personas que escribieron los libros del Tanaj y otros textos judíos. Por cierto, las sensaciones, los sentimientos e histerias nada tienen que ver con espiritualidad. La adoración y la espiritualidad verdaderas no tienen nada que ver con los sentimientos. El espíritu no tiene emociones. La carne tiene nervios. El espíritu no. 

Por ello te digo que fue en las escrituras que descubrí que el cristianismo es la peor de todas las idolatrías, ya que éste se disfraza de monoteísmo y se oculta detrás de algunas prácticas y creencias que usurpó del Judaísmo.

- Cristiano: ¡Pero dime porqué dejaste a Cristo!

- Si me lo permites, voy a hacia eso.

En el Tanaj , en Deuteronomio 13, claramente el Eterno nos advierte que los milagros no son prueba de la verdad. Dios permite a charlatanes hacer milagros para probar nuestra fidelidad. Para eso Dios nos dio un cerebro. Es un regalo único que nos ayuda a discernir qué es o no es verdadero. Por eso el Eterno permitió que lo revelado por él llegara a ser escrito. La capacidad de leer y entender vienen de ese cerebro. Es la capacidad de razonar. Para llegar al alma, Dios llega primero a nuestra capacidad racional.

Existen muchas sectas que no son cristianas ni judías y sus miembros aseguran vivir en una inexplicable paz. Muchos se convierten a esa sectas de “la nueva era” – por ejemplo – y abandonan vicios y se hacen seres limpios y decentes. Esas experiencias no son únicas del cristianismo y del Judaísmo. Por lo tanto nada de eso que ustedes alegan es prueba de la verdad. 

- Cristiano: Pareces olvidar que el “Espíritu” da testimonio a nuestro espíritu de que estamos en la verdad y somos hijos de dios. Así lo dice Romanos 8:16.

- No, no he olvidado esa tontería contenida en tu biblia cristiana. Es equivocada.

La Verdad del Eterno no se mide por sensaciones o “experiencias” emocionales. Hay miles de cosas en este mundo que hacen sentir parecido o igual, pero no tienen nada de verdadero ni proveniente de Dios. La idolatría ciega, te hace experimentar cosas “bonitas” y “espirituales” , pero como dice el Tanaj en el libro de Proverbios / Mishlei 16:25: es CAMINO DE MUERTE eterna. Las Escrituras Hebreas son el testimonio y la revelación verdadera y única de Dios. No hay tal cosa como que el Eterno da testimonio de “Espíritu” a espíritu “de que ya somos o no somos hijos de dios”. Son las escrituras que el Eterno inspiró las que nos dan testimonio, como dices, de lo que es o no agradable a Dios. También la naturaleza nos habla de Dios, al igual que la razón. Avraham Avinu (Abrahan) conoció a Dios por medio de la naturaleza y de su intelecto.

Esas escrituras fueron entregadas al pueblo judío para ser luz a los gentiles.

- Cristiano: Los cristianos no somos gentiles porque Pablo dice que fuimos injertados al Judaísmo.

- Judía: Dices que no quieres hablar de las escrituras, pero estas citando tu testamento cristiano. Y encima de todo lo citas, pero desechas el Tanaj o lo que ustedes llaman “viejo testamento”.

Mira qué disparate tan grande el de Pablo que habla de injertar a un pueblo ajeno a través de la fe ejercida en un ídolo como Jesús.

- Cristiano: No lo llames ídolo. Lo haces para ofenderme porque sabes que creo en él.

- Judía: Inocencio, fuiste tú quien me detuvo y me pidió hablar de estos temas. Del mismo modo que tú dices que mi Dios es tu ídolo hecho carne, asimismo yo tengo en derecho de decirte lo contrario. Me faltas el respeto diciendo que tu ídolo es mi dios encarnado, ¿pero yo no puedo decirte lo contrario? Lo que no es igual es ventaja. No es justo.

La verdad es que el testamento cristiano contiene tantos disparates. Y desgraciadamente la idolatría impulsa a los incautos que han caído como presas del hechizo del nazareno, a buscar siempre “el refuerzo comunitario” para intentar mantenerse en su error.

En vez de buscar la verdad, prefieren oír y buscar todo aquello que refuerce su creencia cristólatra. A menudo, el concepto (o idea) errado puede ser reforzado aún más por las publicaciones, libros, conferencias, predicaciones u otros medios de comunicación que repiten lo mismo que se ha dado por cierto, por verdadero. La frase "millones de personas no pueden estar todos equivocados" es indicativo de la tendencia común a aceptar una idea comunal reforzada sin dudas, que a menudo ayuda en la aceptación generalizada de leyendas urbanas. 

La persona a la que le aterra descubrir que ha estado inmersa en una gran mentira, habitualmente acudirá al refuerzo y rara vez tratará de salirse de su "jaula" en busca de información que pudiese derribar lo que ha abrazado como cierto por tantos años. 

- Cristiano: ¿Entonces todo eso que viviste y experimentaste es una gran mentira? 

- Judía: Tú lo has dicho. Sé sensato contigo mismo y analiza esas creencias que das como verdaderas. Atrévete a pensar y analizar. Te darás cuenta de que son grandes mentiras, grandes disparates. Y ve a la Torá y al resto del Tanaj y descubrirás que Dios nos advirtió en ellos acerca de la cristolatría y la mecalatría (islamismo) miles de años atrás.

Te digo más. Ser gentil no tiene nada de malo. Los gentiles que abandonan la idolatría y practican la Justicia tendrán parte en el OlamHaBá (mundo venidero) como cualquier judío que ame a Dios y practique la Justicia. Dios no hace porquerías. Dios creó a los gentiles. Los hebreos de la antigüedad eran en un principio gentiles hasta que abrazaron la Torá en Sinaí. La única manera de dejar de ser gentil es convirtiéndote al Judaísmo. Decir que dejas de ser gentil al hacerte cristiano es como decir que te haces gentil al convertiste al Judaísmo. ¿No adviertes los disparates de tu testamento cristiano?

- Cristiano: ¡Te reprendo Satanás!

- Judía: ¿Y ahora qué te pasa?

- Cristiano: Estoy reprendiendo a Satanás que te tiene cegada.

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Nuestro amigo cristiano comienza a balbucear y a hacer muecas raras. Los cristianos fundamentalistas llaman a esto “hablar en lenguas”.

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Judía: Bueno, Inocencio. Ya esas tontas sugestiones y supersticiones no me hacen ningún efecto. Sólo me provocan lástima por ti y hasta me parecen risibles. Avísame si ya terminamos nuestra plática.

- Cristiano: Has preferido volver al vómito como hacen los perros.

- Judía: Inocencio, la Torá, el Judaísmo no son vómito. Ya te estás pasando de insultos. ¡Basta! Si esto fuese vómito entonces tu ídolo se revolcó en vómito porque según tu testamento cristiano, si realmente existió, el tipo fue judío. Por un lado ustedes idolatran al estado secular de Israel creyendo que es habitado por judíos solamente, pero por el otro se contradicen llamando “venda”, “atraso” y miles de otras cosas más al Judaísmo. ¡Quién los entiende!

Ustedes convulsionan ante la realidad de que por miles de años el Eterno bendice, protege y reivindica a un pueblo que rechaza, niega y aborrece a tu ídolo Jesús. No pueden entender cómo es posible que un pueblo que abomina y detesta a tu ídolo – y a todos los ídolos – sigue en pie hasta nuestros días, por más que por siglos hemos sido perseguidos y asesinados en nombre de tu ídolo. Perseguidos y asesinados por personas que amaban a tu ídolo Jesús y que muy adentro de ellos creyeron estar haciendo la voluntad del Dios verdadero.

- Bah, como le dije a David. No tiraré perlas a los cerdos.

- “Excuse me?” No sé qué te haya dicho David, pero a mí no me vengas a insultar así.

- Cristiano: Pues la biblia dice así.

- Judía: TU biblia dice así! No uses los insultos de tu biblia para atacarme porque como cristiano no tienes argumentos válidos para persuadirme a regresar a la cristolatría.

- Tú no eres judía. No tienes padres judíos y no naciste en el Estado de Israel. Eres una supuesta judía. Y te irás al infierno por apartarte de Cristo.

- Judía: Jajaja, pobrecito de ti. Preferiría comer vómito que regresar a la idolatría. Mi alma jamás volverá a mancharse con esa idolatría que se disfraza de santidad y de biblia. Que te sugestiona a tal punto que te hace sentir “bonito”, pero al fin de cuentas sigue siendo una gran mentira.

El actual Estado de Israel fue creado sobre bases políticas y logísticas. Es una nación secular de mayoría judía. No es un estado religioso a ser tomado en consideración para efectos de interpretaciones religiosas y mucho menos para predecir tonterías inventadas por la cristolatría evangélica. 

Ninguna persona ajena al Judaísmo tiene autoridad alguna para definir quien es judío. Judío es cualquier persona cuya madre es judía practicante (a su vez de madre practicante) o que ha pasado por el proceso formal de conversión al Judaísmo. En el caso del reformismo es judío también el descendiente de padre judío, sí éste (el padre) es practicante y la hija o hijo es criado bajo el judaísmo, incluyendo obviamente Brit Milá, Bar/Bat Mitzvá y Confirmación.

La prescripción (halájica) sobre la madre no es sólo o necesariamente por cuestiones genéticas, sino porque se entiende que los valores éticos y de fe son transmitidos usualmente por la madre durante la niñez y adolescencia. 

El converso es tan judío como el nacido de vientre judío practicante. El Judaísmo no hace diferencia entre ambos. De hecho, está totalmente prohibido discriminar contra los convertidos al Judaísmo. El famoso rabino  Simón Benlakish del siglo III de nuestra era una vez dijo: “Los conversos al Judaísmo son doblemente amados por Dios”.

Por favor, no vuelvas a pedirme conversar si al final de cuentas no estás abierto a aprender. No me vas a convencer jamás de regresar al ídolo. No te permitiré que me insultes usando versículos de tu biblia. ¡Basta!

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Con toda razón nuestra amiga judía se retiró de la conversación sin despedirse del amigo cristiano que intentaba proselitizarla. Prefirió la paz y decidió marcharse. Independientemente de que Inocencio pueda pensar que ha ganado algo con esta conversación, la única realidad es que Rut prefirió y decidió  alejarse porque no le interesa volver al cristianismo. Se comenta que Inocencio le ha dicho a sus hermanos en la fe, que le puso un “hasta aquí” a Rut. La realidad es que fue ella quien se lo puso a él.
Inocencio quedó confundido. Comenzó a orar, a alzar la manos en los cultos de su iglesia, repitiendo “Jesús, Jesús, Jesús…” Como si la firmeza de sus amigos judíos de algún modo lo estuviese convenciendo o al menos poniéndolo a dudar. Tal y como Rut le dijo: “Desgraciadamente la idolatría impulsa a los incautos que han caído como presas del hechizo del nazareno, a buscar siempre “el refuerzo comunitario” para intentar mantenerse en su error.” 
Inocencio ha tratado dos métodos, pero ninguno le funcionó. Ni sus ayunos ni su cristo ni su fe enorme y firme ni sus oraciones han surtido efecto. Con todo se dispone a hablar con un ex pastor evangélico que dejó el cristianismo para abrazar la Torá como noájida
Para enterarte de qué pasará en su encuentro con el ex pastor, ve a la parte tres  (III) de este relato. 
¡Bendiciones!