El Corán fue codificado años después de la muerte de Muhámmad tras haber pasado por muchas manos diferentes.
Al principio su transmisión era exclusivamente oral. Él mismo no dejó una copia autentificada. Muhámmad muere en el 638 dEC y en el 652 dEC el tercer sucesor de él como dirigente de la comunidad islámica, el califa Uzmán pone por escrito el Corán en su copia definitiva.
A Muhámmad se le conoce como el profeta “iletrado” ya que según la tradición no sabía leer ni escribir. Su ignorancia en muchas de las materias que el Corán trata, según los eruditos islámicos atestigua su inspiración divina al desconocer en principio, por sí mismo, de que estaba hablando. No sólo se pretende destacar el milagro de la revelación, sino distinguir claramente que Muhámmad presuntamente no había leído ni la Toráh ni los Evangelios cristianos.
Cuenta la tradición islámica que el ángel Gabriel (Yibril en árabe) le hizo en realidad leer el libro del Corán (pese a que se dice que era analfabeto) en la Sura al-’alaq 96:1 con el comienzo de la “revelación” por primera vez dice
“Lee اقرَأ ...”
En la que se considera la primera sura revelada:
Biblioteca Estatal de Berlín, Wetzstein II 1925 (Ahlwardt 364) folio 51r. |
ٱقۡرَأۡ بِٱسۡمِ رَبِّكَ ٱلَّذِی خَلَقَ
Lee en el Nombre de tu Señor que creó.
-Quli Qarai, A. (2019). The Qur'an: An English Translation. CreateSpace Independent Publishing Platform, 2019. Cf. Said Reynolds, G. (2018). The Qur'an & The Bible, Text and Commentary. Yale University Press. p.917.
Tal tradición generalmente hace de este versículo la primera revelación pronunciada por el ángel Gabriel a Muhámmad. Una conocida tradición explica que Gabriel le mostró a Muhámmad una especie de tela con palabras y le ordenó "Lee":
“Cuando era la noche en que Dios lo honró con su misión y mostró misericordia de Sus siervos, Gabriel trajo él el mandato de Dios. Él vino a mí,' dijo el apóstol de Dios, 'mientras yo dormía, con una colcha de brocado en la que había algo escrito, y dijo: "¡Lee!”.
(Ibn Hisham 152; traducción al inglés: 106)
Sin embargo, el mandato de apertura de esta Sura (Ar. ikra' bi-smi rabika) refleja la frase hebrea vaicra’ be-shem Adonay (YKVK), que aparece varias veces en la Torah, por ejemplo, Berreshit / Gen 12:8:
וַיִּבֶן־שָׁם מִזְבֵּחַ לַיהֹוָה וַיִּקְרָא בְּשֵׁם יְהֹוָה
“Allí edificó un altar al Eterno e invocó el nombre del Eterno [va-ikra be-shem YKVK]
Mientras que en las traducciones al árabe por Rav Sa’adia Gaón (RaSa”G) y al arameo desde el Targum de Onkelos o la peshita de tradición cristiana, nos da una idea de donde leyó el mismo Muhámmad tales palabras:
Esto podría sugerir que el significado del verso del Corán no es "Lee" (اقرَأ) en el nombre de Dios’ (como dice Qarai) sino más bien es "Invocar" o ‘Proclamar’ (cf. la locución coránica similar con sabbih: 56:74; 69: 52; ver también 73:8; 76:25; 87:1). Uri Rubin ("Ikra' bi-smi rabbika") ve esto como una orden para realizar un "acto devocional" y no como una revelación divina de Yibril a Muhámmad.
Según la creencia islámica, Muhámmad fue un profeta iletrado o inculto, así como también se menciona en varias traducciones de la Sura al-A’raf 7:157:
الَّذينَ يَتَّبِعونَ الرَّسولَ النَّبِيَّ الأُمِّيَّ الَّذي يَجِدونَهُ مَكتوبًا عِندَهُم فِي التَّوراةِ وَالإِنجيلِ يَأمُرُهُم بِالمَعروفِ وَيَنهاهُم عَنِ المُنكَرِ وَيُحِلُّ لَهُمُ الطَّيِّباتِ وَيُحَرِّمُ عَلَيهِمُ الخَبائِثَ وَيَضَعُ عَنهُم إِصرَهُم وَالأَغلالَ الَّتي كانَت عَلَيهِم ۚ فَالَّذينَ آمَنوا بِهِ وَعَزَّروهُ وَنَصَروهُ وَاتَّبَعُوا النّورَ الَّذي أُنزِلَ مَعَهُ ۙ أُولٰئِكَ هُمُ المُفلِحونَ
(Traducción: los que siguen al Apóstol, el profeta no instruido, cuya mención encuentran escrita con ellos en la Toráh y en el Evangelio, que les manda hacer el bien y les prohíbe el mal, les hace lícitos todos los bienes y les prohíbe todos los vicios, y los libera de sus cargas y de las cadenas que estaban sobre ellos; aquellos que creen en él, lo honran, lo ayudan y siguen la luz que ha sido enviada con él,1 son los felices.)
-Quli Qarai, A. (2019). The Qur'an: An English Translation. CreateSpace Independent Publishing Platform, 2019. Cf. Said Reynolds, G. (2018). The Qur'an & The Bible, Text and Commentary. Yale University Press. p. 281.
Aunque en realidad en árabe se denomina “al-nabi al-ummi” النَّبِيَّ الأُمِّيَّ (sura 7:157-58) que quiere decir el ‘profeta del pueblo’ al cual supuestamente no tenía conocimiento de las Escrituras judías o cristianas, más bien, tal palabra árabe significa que es un ‘no-judío’, un ‘gentil’ (suras 2:78; 3:20,75; 62:2).
La palabra ‘umm (أُمَّةٌ, Cf. Sura 7:34, 38) es un préstamo del arameo אוּמָּא (umá’) o ܥܡܐ - עמא (ver. Targum Yerushalaim Devarim 29:12; Midrash Mishlei 30:7; Targum Onkelos Berreshit 12:2; Midrash Tehilim 9:8; Peshitta sobre Berreshit 12:2.) la cual significa ‘gentes’ o más tardíamente ‘gentiles’ o ‘no-judíos’ (ver. Talmud Bavlí Shabat 32a; Targum Mishlei 24:24.) Cuando leemos en árabe la expresión “al-nabi al-ummi” النَّبِيَّ الأُمِّيَّ es relativo a los gentiles, un ‘profeta gentil’ (נביא גוי). Es decir, Muhámmad se está comparando al nivel de Bila’am, ya que leemos en el Talmud Bavlí Sanhedrin 39b que a Bila’am se le consideraba como un profeta gentil:
ועוד מסופר, אמר ליה [לו] ההוא מינא [מין אחד] לר' אבינא: כתיב [נאמר] "ומי כעמך כישראל גוי אחד בארץ" (שמואל ב' ז, כג), מאי רבותייהו [מה גדולתכם]? אתון נמי ערביתו בהדן [אתם גם כן מעורבים יחד איתנו], שגם עליכם כתיב [נאמר] "כל הגוים כאין נגדו מאפס ותוהו נחשבו לו" (ישעיה מ, יז)! אמר ליה [לו]: מדידכו אסהידו עלן [משלכם נביא גוי, בלעם, כבר העיד עלינו], דכתיב [שנאמר]: "הן עם לבדד ישכון ובגוים לא יתחשב" (במדבר כג, ט)
Cierto hereje le dijo al rabino Avina : Está escrito: “Y quién como tu pueblo, Israel , una nación en la tierra” (II Samuel 7:23). El hereje preguntó: ¿Cuál es tu grandeza? Tú también estás mezclado con nosotros, como está escrito: “Todas las naciones delante de Él son como nada; menos que nada y vanidad los tiene por Él” (Isaías 40:17). El rabino Avina le dijo: Uno de los tuyos, el profeta gentil Bila’am, ya ha testificado por nosotros, como está escrito:
“Es un pueblo que habitará solo, y no será contado entre las naciones” (Números 23:9), enseñando que donde el versículo menciona “las naciones”, el pueblo judío no está incluido.
Cf. T.B. Sanhedrin 105a; Zevajim 116a; Rabeinu Bajya sobre Vaicrá 9:1)
Otro ejemplo, en la Sura al-Bakara’ 2:78-79 donde se utiliza la palabra que traduce en el versículo 78 como "analfabetos" - ummiyin (sing, ummi cf. 3:20; 3:75; 7:157-58; 62:2) - de hecho se refiere a aquellos que no conocen el palabra de Dios (cf. 3:20). El Corán se refiere a Muhámmad como un profeta ummi (Sura 7:157-58) porque provenía de un pueblo al que Dios aún no había enviado la revelación ("el Libro [de la Torah]"); tal como se lee en la Sura 29:47-48.
Como señala Holger Zellentin (The Qur'an's Legal Culture, 158n2), que niega que Muhammad escribiera la Escritura del Corán, pero esto por supuesto no es lo mismo que afirmar que él fue analfabeto.
Por otra parte, en la Sura 7:157 del Corán, informa que Muhámmad hará que las cargas de la Torah (التَّوراةِ) sean más fáciles para sus seguidores (él "les alivia de sus cargas"; cf. 2:286). Heinrich Speyer (en Die biblischen Ezrählungen imQoran 453) compara esto con Mateo 11:30, donde Yeshu declara: רק ומשאי קל (‘Solo mi carga es ligera’). El Corán pone a Muhámmad a la altura de Yeshu ben Pandira, y a diferencia de Yeshu que fue judío por vía materna, pone a Muhámmad como un profeta no-judío a la altura de Bila’am.
Según los musulmanes, con base a una mala comprensión del Corán en la que piensan que Muhámmad fue un profeta ‘iletrado’ y por tanto fue un ‘canalizador’ del mensaje divino creen erróneamente que el Corán sea el único libro que es una copia fiel del Libro que Alláh tiene en el Cielo. Para el Islam, mencionan que la Toráh está llena de errores añadidos por los “pérfidos” judíos o de supresiones (suras 2:56, 73, 141, 154, 169; 3:64; 4:158; 5:16,45; 6:147; 7:162; 16:119) o incluso de vocalizaciones maliciosas por eso la ley musulmana (sharia) vino a derrocar toda ley anterior. Además mencionan que las leyes judías solo son prescripciones temporales (suras 4:158; 6:147; 16:119) sin valor en la actualidad y la Toráh sólo es una parte del libro de Alláh (suras 4:47; 3:115); o esto es lo que él contestaba cuando los judíos le recriminaban su ignorancia sobre la Biblia Hebrea (Tanaj).
Puede ser que la pronunciación y lectura del hebreo que tuviesen los judíos de Arabia con los que contactó Muhámmad no fuese la mejor del mundo, o él no entendiese el idioma y las normas de lectura, pero al hombre parece que le iba la exageración.
En fin, por todo ello el Corán dice en una ocasión de los judíos la lindeza de que no tienen más idea sobre el Texto que asnos cargados de libros (sura 62:5). La Toráh fue escrita por Moshé, el Maestro de los Profetas, con su propia mano directamente del dictado de HaShem y hasta el día de hoy no ha cambiado ni una sola letra ya que es eterna e irrevocable. Para muchos judíos por su fidelidad es la Revelación definitiva para toda la Humanidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu opinión es importante para nosotros!