Fue el alemán Martin Lutero quien en 1543 escribirá el que es
considerado el primer tratado moderno antisemita “Sobre los Judíos y sus
Mentiras”. Durante el juicio de Nuremberg a los Nazis alemanes por sus
crímenes de guerra, estos justificaron el asesinato de 6 millones de judíos
usando el libro de Lutero “Sobre los Judíos y sus Mentiras”. En el
Tribunal alegaron en su defensa que no habían hecho otra cosa más que ejecutar
lo que Martín Lutero había ordenado cuatro centurias antes.
Lutero decía que debían quemarse todas las sinagogas judías,
destruir sus libros de oración, prohibir predicar a los rabinos, “aplastar y
destruir” sus casas, incautarse de su propiedades, confiscar su dinero y
obligar a esos “gusanos venenosos” a realizar trabajos forzados o expulsarlos
“para siempre”. En sus medidas resaltan cuatro puntos:
Primero, sus sinagogas
o iglesias deben quemarse…
En segundo, sus casas
deben asimismo ser derribadas y destruidas…
En tercer lugar, deben ser
privados de sus libros de oraciones y Talmudes en los que enseñan tanta
idolatría, mentiras, maldiciones y blasfemias.
En cuarto lugar, sus rabinos
deben tener prohibido, bajo pena de muerte, enseñar jamás… La furia de dios
contra ellos es tan grande que están cada vez peor… Para resumirlo, estimados
príncipes y nobles que tenéis judíos entre vuestras posesiones, si mi consejo
no os es suficiente, buscad otro mejor para que vosotros, y todos nosotros
seamos libres de esta insoportable carga diabólica”. -Lutero- “ ¿Quién les
impide a los judíos volver a Judea? Nadie… Les proveeremos todas las
provisiones para el viaje, para vernos por fin libres de ese repulsivo gusano.
Para nosotros, ellos son una grave carga, la calamidad de nuestra existencia.
Son una peste enclavada en nuestras tierras”.
-Lutero. Sobre
los Judíos y sus Mentiras.
En opinión del historiador Dr. Robert Michael, parece ser que
Lutero aprobaba el asesinato de judíos. “Yo les arrancaría la lengua de
la garganta. Los judíos, en una palabra, no deben ser tolerados”. (-Lutero.
Sobre los Judíos y sus Mentiras.)
También les acusa de dedicarse al hurto y a la usura, tal como
dice:
“Si no fueran
tan ciegos, su despreciable vida externa los convencería de la verdadera
naturaleza de su penitencia. Ya que abunda en brujería, signos de magia,
figuras y el tetragrama del nombre, eso es, con idolatría, envidia y vanidad.
Además, no son más que ladrones y asaltantes que diariamente no prueban bocado
y visten ropa que nos han robado y hurtado por medio de su maldita usura. De este
modo viven día a día, junto con esposa e hijo, de robo y hurto, como
archiladrones y asaltantes, en total impenitente seguridad. Para un usurero es
un archiladrón y asaltante que debería ser colgado en la horca siete veces más
alto que otros ladrones. En efecto, dios debería profesar desde el cielo sobre
tal hermosa penitencia y mérito a través de su santo ángel y volverse
flagrante, mentiroso blasfemo por el bien de la sangre noble y los santos
circuncisos que se jactan de ser santificados por los mandamientos de dios, a
pesar de que los pisotean a todos y no conservan ni a uno de ellos”.
-Lutero. Sobre
los Judíos y sus Mentiras.
Durante la guerra de los campesinos de 1524, Lutero apoyó a las
autoridades feudales para que mataran indiscriminadamente a los campesinos
hambrientos y desobedientes. En su predicación decía:
"Contra
los asesinos y ladrones campesinos, en esto mojo mi pluma en sangre". [LM180], y
"llamo a los príncipes a matar a los ofensivos campesinos como perros
rabiosos, a apuñalarlos, a estrangularlos y destruirlos como mejor puedan y así
recibirán los príncipes la promesa del cielo." [SL44] “Lo que
entonces escribí lo vuelvo a escribir ahora: que nadie tenga misericordia de
los campesinos contumaces, obstinados y obcecados, que no se dejan decir nada;
el que pueda, y como pueda, que les pegue, los hiera, los degüelle, los muela a
palos como a perros rabiosos, […] con el fin de conservar la paz y la
seguridad. […] El burro pide palos y el pueblo quiere que se le gobierne
con fuerza; esto lo sabía muy bien Dios y, por eso, puso en manos de la
autoridad no la cola de zorro, sino una espada”.
-Martin Lutero.
Carta sobre el duro librito contra los campesinos.
En el año de 1525 sus consejos fueron literalmente seguidos. Las
peleas se transformaron más en masacres que en batallas y los pobres campesinos
fueron asesinados como animales en el campo.
Lutero se casará con la monja Katherina von Bora con quien tendrá
varios hijos. No obstante, tendrá una opinión muy peyorativa respecto a las
mujeres. En una predicación sobre las embarazadas decía:
“Dejen nos
tener su hijo y hagan lo que puedan; si mueren: benditas sean porque
seguramente morirán en la noble labor y de acuerdo a la voluntad de Dios... Han
visto que débiles y enfermizas son las mujeres infértiles; aquellas bendecidas
con muchos hijos son mas sanas, mas limpias y más felices. Pero si
eventualmente se desgastan por tener hijos y se cansan y se mueren, eso no
importa. Dejen que mueran pariendo, para eso están aquí."
-Martín Lutero, Sobre la Vida Matrimonial, 1522.
Los últimos años de la vida de Lutero fueron caracterizadas por su
mala salud y nuevas preocupaciones sobre el papel mesiánico de Yeshu. Esto lo
llevo hacia un enfrentamiento con el judaísmo, el cual el aborrecía.
Durante el juicio de Nuremberg a los Nazis alemanes por sus
crímenes de guerra, estos justificaron el asesinato de 6 millones de judíos
usando el libro de Lutero “Sobre los judíos y sus mentiras”. En el
Tribunal alegaron en su defensa que no habían hecho otra cosa más que ejecutar
lo que Martín Lutero había ordenado cuatro centurias antes.
Después de todo, entre los viles ataques de Lutero contra los
judíos se encuentran expresiones como:
"Sus
alientos apestan por el oro y la plata de los infieles; porque no hay gente
sobre la tierra que sea, haya sido o Será, más avara que ellos, como pueden ser
vistos en su maldita usura. Entonces sepan, mis queridos cristianos, que
después del diablo, no hay nada más agrio, más ponzoñoso, más vehemente y
enemigo que un verdadero judío que realmente desea ser judío... ¿Acaso no su
Talmud y sus rabinos escriben que no es pecado si un judío mata a un infiel,
pero que si es pecado si mata a un hermano en Israel? No es pecado si no
mantiene su juramento a un infiel. Entonces, el robar y asaltar -como lo hacen
con sus préstamos - a un infiel, es un servicio divino... ¿Qué debemos de hacer
con este rechazado y condenado, pueblo judío?...
-Lutero. Sobre
los Judíos y sus Mentiras,1543.
Así quejándose de como "los cristianos habían sido
torturados y perseguidos por los judíos en todo el mundo", Lutero
ofrece su "sincero consejo":
"préndale
fuego a sus sinagogas o escuelas y entierren y cubran con tierra todo aquello
que no se pueda quemar...Yo aconsejo que sus casas sean arrasadas y
destruidas... Yo aconsejo que todos sus libros de rezos ... en los cuales tales
idolatrías, mentiras, maldiciones, y blasfemias se enseñan, quítenselos, ... y
que a sus rabinos se les prohíba enseñar de allí en mas, bajo pena de perdida
de vida o miembros...que los salvoconductos en los caminos sean abolidos
completamente para los judíos... y que todos sus tesoros de plata y oro se les
sean quitados....
Pero si las
autoridades se rehúsan a usar la fuerza para restringir al diabólico atropello
de los judíos, entonces los judíos, como hemos dicho, deben de ser expulsados
de sus países y ordenados a volver... a Jerusalém, a donde puedan mentir,
maldecir, blasfemar, difamar, asesinar, robar, asaltar, practicar la usura,
burlarse y regodearse en todas esas infames abominaciones que ellos practican
entre nosotros y que se vallan....nuestro Señor el Mesías, nuestra fe y nuestra
iglesia incorrompida y descontaminada de su diabólica tiranía y maldad."
-Lutero.
Sobre los Judíos y sus Mentiras, 1543[SH248].
Por último, les presentamos otras de las perlas de amor cristiano de Martín Lutero (1483‐1546) hacía los judíos:
“Los judíos envenenan, son asesinos rituales, usureros; ellos son parásitos de la sociedad cristiana; son peor que demonios; es más difícil convertirlos a ellos que al propio Satanás; ellos están destinados al infierno. Ellos son, en verdad, anticristo. Sus sinagogas deberían ser destruidas y sus libros decomisados; deberían ser obligados a trabajar con las manos; más aun, deberían ser expulsados por los príncipes de sus territorios.
Para empezar, deberíamos de incendiar sus sinagogas, segundo debiéramos entrar en sus casas y destruirlas, tercero, debieran verse privados de sus libros de oración..., cuarto, debemos prohibir a sus rabinos, bajo pena de muerte, seguir enseñando, quinto, deberíamos de prohibirles totalmente el pasaporte y otros privilegios de viaje a los judíos, sexto deberíamos impedirles hacer usura. Azotemos a los fuertes judíos y judías, ataquémosles con el hacha, con la pala de la rueca, con la rueca y hagamos que se ganen el pan con el sudor de susnarices. Debiéramos de golpearles hasta corregir la canallesca pereza de su sistema. Así que acabemos con ellos.
-Martín Lutero 1523 E.C.Para resumir, queridos príncipes y nobles que tenéis a judíos en vuestros dominios, si este consejo mío no os complace, hallad uno mejor para que vosotros y nosotros podamos vernos libres de esta insufrible carga demoníaco que son los judíos”
Buena historia, voy a investigar más a Lutero. Gracias
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