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8/14/2013

Deuteronomio 4:19: La "permisión" de la creencia de los mesiánicos conforme a la Torah; Judíos-mesiánicos sin acceso al Olam Haba


Los seguidores de Yeshu vienen preguntando últimamente si hay algo malo en adorarlo y aceptarlo como deidad o intermediario entre Dios y sus seguidores.

Para el “judaísmo” mesiánico y la secta de los avdielitas del Sábado Lunar (natzratim) consideran que Yeshu es una especie de intermediario entre Di”s y los hombres, o bien hay quienes creen que él sea una especie de deidad, o en casos más “decentes” dicen que fue enviado divinamente para salvarlos y es por ello que se le tiene que dar gloria al mamzer de Yeshu HaNoztrí


Los exhortos de los mesiánicos porque reconozcamos a Yeshu HaMamzer, no recuerda a lo que escribe el RaMBa”M (Maimónides) en su magna obra, Ya”d Jazakah o Mishneh Torah, Hiljot Avodah Zarah, explica el concepto de idolatría y su impedimento a la relación entre el hombre y Dios. Él identifica la idolatría como la adoración inapropiada de elementos tales como animales, plantas, estrellas e incluso personas y afirma que la idolatría disminuye la relación del hombre con lo divino. Según Maimónides, esto ocurre porque se adelanta al reconocimiento de la unicidad de Dios. Él identifica la idolatría como un gran obstáculo en el desarrollo de una relación entre el hombre y Dios porque anima al hombre a alejarse del único Dios verdadero. Esto puede llevar al hombre a creer que a través de la idolatría puede otorgarse el favor divino a sí mismo y manipular el mundo que lo rodea. Maimónides nos recuerda que la idolatría es una práctica peligrosa que ha llevado a la desunión de la comunidad ya creencias sagradas más basadas en la superstición que en la verdadera devoción. Además, Maimónides explica que la idolatría impide el desarrollo de una relación personal entre el hombre y Dios. Para que el hombre alcance a Dios, la idolatría tiene el potencial de bloquear esas vía de comunicación y reducir el potencial del hombre para formar una relación significativa y personal. En esta obra, Maimónides ofrece un análisis exhaustivo de los niveles de idolatría, cómo funciona.


Maimónides en Hiljot Avodah Zara ve’Jukot HaGoim (Leyes sobre Idolatría y Paganismo) 1:1-2 dice lo siguente:

א  בִימֵי אֱנוֹשׁ טָעוּ בְּנֵי הָאָדָם טָעוּת גָּדוֹל וְנִבְעֲרָה עֲצַת חַכְמֵי אוֹתוֹ הַדּוֹר וֶאֱנוֹשׁ עַצְמוֹ מִן הַטּוֹעִים הָיָה. וְזוֹ הָיְתָה טָעוּתָם. אָמְרוּ הוֹאִיל וְהָאֱלֹהִים בָּרָא כּוֹכָבִים אֵלּוּ וְגַלְגַּלִּים לְהַנְהִיג אֶת הָעוֹלָם וּנְתָנָם בַּמָּרוֹם וְחָלַק לָהֶם כָּבוֹד וְהֵם שַׁמָּשִׁים הַמְשַׁמְּשִׁים לְפָנָיו רְאוּיִין הֵם לְשַׁבְּחָם וּלְפָאֲרָם וְלַחֲלֹק לָהֶם כָּבוֹד. וְזֶהוּ רְצוֹן הָאֵל בָּרוּךְ הוּא לְגַדֵּל וּלְכַבֵּד מִי שֶׁגִּדְּלוֹ וְכִבְּדוֹ. כְּמוֹ שֶׁהַמֶּלֶךְ רוֹצֶה לְכַבֵּד הָעוֹמְדִים לְפָנָיו וְזֶהוּ כְּבוֹדוֹ שֶׁל מֶלֶךְ.

ב  כֵּיוָן שֶׁעָלָה דָּבָר זֶה עַל לִבָּם הִתְחִילוּ לִבְנוֹת לַכּוֹכָבִים הֵיכָלוֹת וּלְהַקְרִיב לָהֶן קָרְבָּנוֹת וּלְשַׁבְּחָם וּלְפָאֲרָם בִּדְבָרִים וּלְהִשְׁתַּחֲווֹת לְמוּלָם כְּדֵי לְהַשִּׂיג רְצוֹן הַבּוֹרֵא בְּדַעְתָּם הָרָעָה

1. En los tiempos de Enosh, los hombres cometieron un grave error. La prudencia de los sabios de aquella generación se obnubiló; el mismo Enosh estuvo entre los que cometieron el error. Su error fue éste: pensaron que, puesto Di”s creó los astros y las esferas celestiales para guiar al mundo, los colocó en lo alto y les otorgó honores –de hecho son sus lacayos que le sirven-, merecían ser alabados, glorificados y honrados. Es voluntad de Di”s bendito sea, enaltecer y honrar a quien lo enaltece y honra, del mismo modo que un rey desea honrar a quienes sirven ante Él,  porque ésa es la hora del rey...

2. Cuando concibieron esta idea, comenzaron a construir templos a los astros y a ofrendarles sacrificios, alabarlos y glorificarlos de palabra y a arrodillarse ante ellos, creyendo equivocadamente que así se ganaban el favor del Creador.

-Ben Maimón, M. (1998). Maimónides, משנה תורה לרבנו משה בן מימון, A 800 años de su aparición por primera vez en español (A. Platkin, M. Katznelsón, I. Niborski & J. I. Lerman, Trads.). Editorial Sinai. p.30.


A lo que me remitió recordar una sección de la Torah, en la sección Parshat Vaetjanán, Sefer Devarim / Deuteronomio 4:19, en la que se lee:

Codex Sassoon, folio 158b.

וּפֶן-תִּשָּׂא עֵינֶיךָ הַשָּׁמַיְמָה, וְרָאִיתָ אֶת-הַשֶּׁמֶשׁ וְאֶת-הַיָּרֵחַ וְאֶת-הַכּוֹכָבִים כֹּל צְבָא הַשָּׁמַיִם, וְנִדַּחְתָּ וְהִשְׁתַּחֲוִיתָ לָהֶם, וַעֲבַדְתָּם--אֲשֶׁר חָלַק ה' אֱלֹהֶיךָ, אֹתָם, לְכֹל הָעַמִּים, תַּחַת כָּל-הַשָּׁמָיִם.

[19] Y al alzar tus ojos al cielo, al sol, a la luna, a las estrellas y a las demás huestes del cielo, no seas inducido a adorarlos o servirlos, pues el Eterno tu Dios los asignó a todos los pueblos que moran bajo el cielo

Katznelson, M. (1996). La Biblia, hebreo-español, Versión castellana conforme a la tradición judía por Moisés Katznelson. Tel Aviv, Israel: Sinai Publishing. Volumen I. p. 295.


La interpretación judía de Devarim 4:19 sirve como un importante recordatorio contra la idolatría, ya que dice: “No levantes los ojos al cielo-וּפֶן-תִּשָּׂא עֵינֶיךָ הַשָּׁמַיְמָה”, para enfatizar que está prohibido adorar a alguien que no sea Dios. Esta declaración se aplica a todas las formas de idolatría, incluidas aquellas que pueden relacionarse con Yeshú. La idolatría es la práctica de adorar a cualquier dios que no sea Dios, y la fe judía lo prohíbe estrictamente. Muchos judíos creen que el cristianismo es una religión exclusivista, que intenta adorar a Yeshú de una manera que va en contra de la comprensión judía de la unidad de Dios. Según el pensamiento judío, es imposible adorar otra cosa que no sea la única unidad de Dios. Por lo tanto, los judíos creen que creer en Yeshu como cristianos o como los mesiánicos es participar en una adoración idólatra. Los judíos a menudo señalan pasajes de la Toráh, como Devarim 4:19, que les recuerdan su compromiso con Dios y la unidad de lo divino. Esto resalta la importancia de la fe judía en adorar a un solo Dios y las prohibiciones contra el politeísmo (creer en múltiples dioses) y el henoteísmo (creer en múltiples dioses pero solo adorar a uno). En última instancia, Devarim 4:19 consideramos que creer en Yeshu es idolatría. 


El Talmud Bavlí masejet Avodah Zara 55a se explica bajo la opinión de R’ Yehudah que las naciones fueron engañadas para que estas adoren ídolos y estas sean expulsadas (del Mundo Venidero), tal como se lee allí:


אמר ליה [לו]: השתא, אי הוי שכיבנא, לא אמרי לכו הא מלתא [עכשיו, אם הייתי מת, לא הייתי אומר לכם דבר זה], שיפה עשיתם ששאלתם, כי על ידי כך נזכרתי שאמר רב, מאי דכתיב [מהו שנאמר]: "וראית את השמש ואת הירח... אשר חלק ה' אלהיך אתם לכל העמים" (דברים ד, יט)? מלמד שהחליקן הקדוש ברוך הוא בדברים הניח להם לטעות בדבר, כדי לטורדן מן העולם על שבחרו לעבוד עבודה זרה.

Rav Yehudah le dijo a Rava bar Rav Yitzjak: Ahora, si estuviera muerto, no habría podido contarte la explicación de este asunto. Por lo tanto, es bueno que me hayas recordado este asunto mientras estoy vivo. La explicación es como dice Rav: ¿Cuál es el significado de lo que está escrito:Para que no elevéis los ojos hacia el cielo y veáis el sol y la luna y las estrellas, toda la legión del firmamento, y os descarriéis y os inclinéis ante ellos y los adoréis, a ellos, a los que El Etern-o, vuestro Di"s, ha designado para todos los pueblos bajo todo el firmamento.” (Deuteronomio 4:19). El verso enseña que Dios permitió que las naciones fueran engañadas [shehejelikan] por asuntos que aparentemente indican que la adoración de ídolos es efectiva para expulsar a las naciones del mundo debido a su decisión de participar en la adoración de ídolos.

La opinión de Rabí Yehudah, es que las naciones han sido engañadas para que adoren ídolos y, por lo tanto, serán excluidas del Mundo Venidero. Esto podría significar que aquellos que observan las creencias mesiánicas, cristianas o netzarim, como los idólatras de la época de Enosh antes que ellos, serán incluidos entre los que no son aptos, ya que adoran a un supuesto 'ser divino' conocido como Yeshúa y le muestran una reverencia particular. Explica RaSh”I, que Di-s asignó la luz del sol, la luna y las estrellas para todas las naciones, pero no impidió que Israel se extraviara con esta interpretación y así hacer de estos en ídolos. En cambio, a tales naciones les permitió errar a través de está interpretación para que fueran expulsados del mundo (venidero). Esta lógica se repite en el Salmo 36:3, que afirma que el hombre errará por sus ojos y hasta que se descubra su maldad y sea despreciado:

אשר חלק ה'. לְהָאִיר לָהֶם (מגילה ט'); דָּ"אַ לֶאֱלוֹהוֹת, לֹא מְנָעָן מִלִּטְעוֹת אַחֲרֵיהֶם אֶלָּא הֶחֱלִיקָם בְּדִבְרֵי הַבְלֵיהֶם לְטָרְדָם מִן הָעוֹלָם, וְכֵן הוּא אוֹמֵר (תהלים ל"ו) "כִּי הֶחֱלִיק אֵלָיו בְּעֵינָיו לִמְצֹא עֲוֹנוֹ לִשְׂנֹא" (עבודה זרה נ"ה):

אשר חלק ה׳ pues el Eterno tu Dios los asignó para darles luz (a todos los pueblos) (Megilah 9b). — Otra explicación: que Dios les asignó como deidades; No impidió que se extraviaran tras ellos, sino que les permitió errar (deslizarse) por medio de vanas especulaciones, para expulsarlos del mundo. De manera similar afirma, (Salmos 36: ) "Él (Dios) lo hizo errar (deslizarse) a través de sus ojos (es decir, a través de lo que sus ojos contemplan) hasta que se halle su iniquidad y sea aborrecido" (Avodah Zarah 55a) .

 La misma Torah nos advierte lo siguiente en Sefer Devarim 4:20:

וְאֶתְכֶם לָקַח ה, וַיּוֹצִא אֶתְכֶם מִכּוּר הַבַּרְזֶל מִמִּצְרָיִם, לִהְיוֹת לוֹ לְעַם נַחֲלָה, כַּיּוֹם הַזֶּה./

[20] A vosotros el Eterno os tomó y sacó del horno de hierro de Egipto para que seáis el pueblo de Su heredad, como lo sois hoy.

-Katznelson, M. (1996). p.295. 

Devarim 4:19-20 no sustenta la creencia de los judíos en Yeshú, como lo evidencian los pueblos idolatras y sus posteriores manifestaciones cristiana y sus sectas perniciosas como los mesiánicos y natzartim. Confiamos en su sentido común al comprender que esta es una de las muchas razones por las cuales los judíos NO podemos aceptar a Jesús o Yeshú ni como mediador, ni como ninguna otra figura.


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